Magnolia

"No dejes que nadie te diga que no tienes que arrepentirte de nada. No los dejes . ¡No! Te arrepientes de la mierda que te dé la gana. Úsalo. Úsalo. Usa ese remordimiento para lo que te dé la gana, de la forma que quieras. Lo puedes usar. Oh Dios mío, es un camino largo y sin meta, una pequeña historia final. Digo...amor, amor, amor. Esta jodida vida...Oh, es jodidamente difícil. Es tan larga. La vida no es corta, es larga. Es larga maldita sea."

sábado, 31 de enero de 2015

WHIPLASH
Dirección: Damien Chazelle
Reparto: Milles Tellers, J.K Simmons, Melisa Benoist, Chris Mulkey, Paul Reiser, Austin Stowell.

Definitivamente, creo en las operas primas. No sabía nada del desconocido director Damien Chazelle,  Milles Tellers había salido en "Divergente" y estaba anunciado como Mister Fantástico en los proyectos de Marvel (Razones más que suficientes para entrar en una lista negra de la que difícilmente iba a poder escapar) y J.K. Simmons solo era para mí el reportero malhumorado de la trilogía de Spiderman de Sam Raimi. Con lo cual la carta de presentación de la película no me decía nada de nada. Ahora doy gracias al cielo por haber ido a verla.

Siempre que hablamos de la banda sonora de una película, hablamos de su capacidad para complementar la escena. De cómo esa escena adquiere tonos épicos, de como ese momento te hace soltar la lagrimilla y de cómo esa persecución hace que se te salga el corazón por la boca. Todos ellos sonidos complejos, que juegan con nuestra mente y nuestras expectativas a golpe de batuta. En "Whiplash" ese recurso es llevado al extremo mediante el instrumento más rudimentario y tosco, la batería.

"Whiplash" es una película especializada. Una película sobre el Jazz dirigida por un loco del Jazz. Una película sobre la batería interpretada por una maquina en la batería. Una película sobre un profesor cabrón interpretado por el cabrón más cabrón de la industria. Una película que te hará vibrar de nerviosismo, de exaltación, y que jugara con los nervios de la audiencia como un titiritero hace malabares con unas granadas de mano. Una película en la que la música tiene la excepcional capacidad de dilatar y contraer el tiempo psicológico. En la que el solo de Tellers en el que sabes que el mínimo fallo destrozará todo por lo que ha estado luchando se te hace largo y agónico. En la que puedes sentir la presión circundante en forma de oscuridad de sala de conservatorio presionándote las sienes. En la que el rudo sonido de la percusión inflamará tu cerebro y te hará moverte al ritmo de la música.

Es una película magníficamente pensada y ejecutada, pero también con unas interpretaciones de indudable talento. Milles Tellers es sencillamente una revelación. Una joven promesa que estoy convencido que con un poco de suerte y un buen agente acabará llegando a lo más alto. Y J.K Simmons demuestra tener un talento innato que todavía nadie había descubierto en él de la manera adecuada. Juntos, sumergirán al espectador en una guerra de karmas extrema, en la que no sabes exactamente que acto está justificado y cual no. Una reflexión profunda sobre que significa ser profesor, que es la docencia, si existe un límite para exigir al alumno, donde esta ese límite y las consecuencias, tanto positivas como negativas de cruzarlo.

De bajo presupuesto, nada como un dosificador cuentagotas para exprimir lo que tienes. "Whiplash" pone de manifiesto el talento de Damien Chazelle. Un joven director del que la industria debería aprender mucho. Un director capaz de generar con 2 personajes y un solo de batería más tensión que cualquier película de Marvel. Ya no es solo que la historia sea más consistente, sino que Chazelle ha echado mano de recursos que hacen que un solo de 5 minutos de batería sea visionado sin aburrirse ni una milésima de segundo. Ha conseguido la concatenación de sonidos con una precisión milimétrica. Ha conseguido que el sonido vibre en los tímpanos de los espectadores después de ver la película y que les siga produciendo las sensaciones que tuvieron durante el visionado.

Whiplash es, en todos los sentidos, un prodigio. Una película que resulta difícil de creer que este tan impecablemente realizada, interpretada y pensada a nivel de estructura y trama. ¿Cómo se puede crear una película de tal fuerza ambientada en un conservatorio de jazz? Yo sigo sin explicármelo. Whiplash es un llamamiento a unos determinados valores del cine. A librarse de la parafernalia, a darle a la música una importancia especial y a centrarse en una serie de personajes que vean sus sueños truncados de una manera extrema. Whiplash es una película cabrona, agonizante, repleta de ritmo y con una capacidad de inmersión sin precedentes. Una película que te hace sentir incómodo, en tensión y frenético a la vez. Que juega con la música para producir sensaciones hasta el punto de que el espectador podrá notar la vibración de las baquetas entre golpe y golpe a la caja de resonancia. Donde se consigue una simbiosis total entre historia y música. Clara favorita para los Oscar, aunque dudo mucho que se lo lleve, es demasiado buena.

Nota: 10/10

LA TEORÍA DEL TODO
Dirección: James Marsh
Reparto: Edie Redmayne, Felicity Jones, David Thewlis, Harry Loyd, Simon McBurney, Charly Cox, Emily Watson.

Hay ocasiones, a lo largo de la historia del cine, en las que bodrios sin parangón consiguen colarse entre las nominadas a los óscar e incluso a veces consiguen ganarlos. Se trata de películas donde el amor es incondicional, los personajes inundan la cámara hasta cuando no les toca y donde lo único que falta es que el susodicho nominado por la academia agarre la cámara de filmación y grite a toda la audiencia, "dame un oscar pls".

"La Teoría del Todo" es una de esas películas. Una de esas películas en las que el espectador confunde la historia lacrimógena y conmovedora con la buena historia. Una de esas películas en las que la empatía bobalicona se exalta por determinados personajes muy bien interpretados, que sueltan a diestro y siniestro un guión repugnante a lo largo de escenas que no tienen ni pie ni cabeza. Una de esas películas en las que el susodicho director suda completamente de realizar un producto competente porque el único y exclusivo objetivo de la cinta es que el prota gane el Oscar.

Y claro, ¿Con que nos encontramos? Pues con un Eddie Redmayne que lo peta en la silla de ruedas. Y una Felicity Jones que no está nada mal. Pero claro, cuando haces una película con el único objetivo de que la parejita se lleve el Oscar el resto de los aspectos se resienten. ¿Creen que una película sobre la vida científica de Stephen Hawkings hubiese estado nominada? Ya se lo digo yo, no. Es por esto que en vez de distraernos con agujeros negros, complicadas ecuaciones y teorías gravitacionales (Que todo el mundo sabe que a todo hijo de vecino lo que le gusta son los arrumacos y no las matemáticas) nos cascaran una película que lejos de ir sobre Stephen Hawkings, va sobre su mujer, y las ganas que tiene de tirarse a un profesor de piano. Pero la pobrecita no puede porque está casada con un inválido. Pobre Felicity que no puede calzarse al pianista, y pobre Eddie que va en silla de ruedas. Por favor.

La película deja de lado deliberadamente cualquier tipo de elemento narrativo que realmente haga hincapié en la verdadera razón por la cual Stephen Hawkings  es famoso a día de hoy. Sus teorías físicas. Y mas bien da la sensación de que Stephen Hawkings lo único que ha hecho en su vida es dar problemas a su pobre esposa que necesita a un varón que se pueda mover por si solo en su vida para saciarse afectiva y sexualmente. Se trata de una película que huye por completo de los temas verdaderamente importantes y se centra en ofrecer una versión lacrimógena, oscarizable y de sensiblerismo barato sobre la vida de un gran hombre, o más bien de su pobre mujer, con la que todo quisqui se sentirá identificado.

¿Cuál es el único punto fuerte de la película? Redmayne, que hace una interpretación de Hawkings que quita el hipo, y mucho ojo también a el trabajo de maquillaje que hay por detrás, porque Redmayne da el pego totalmente a cualquier edad. Pero aparte de su brillante y muy posiblemente oscarizable interpretación, la película esta vacía por completo de cualquier otro elemento que a haga interesante, solo un dilema cutre que se alarga durante 2 horas propio de una telenovela colombiana y a mi juicio, no propio de una película seria sobre una eminencia en el campo de la física teórica.

Al verla, es difícil no pensar en Daniel Day Lewis y en su película "Mi Pie Izquierdo". Y en seguida comienzan a aparecer las diferencias entre una película y otra. Mientras "Mi Pie Izquierdo" narraba la verdadera historia psicológica de su protagonista con parálisis, "la Teoría del Todo" se limita a usar la personalidad de Stephen Hawkings como paquete, como "McGuffin" al servicio de otra historia. Una película que lejos de contar la vida de un gran hombre cuenta la difícil decisión de la mujer del gran hombre sobre elegir pareja para la cópula. Una película en donde cada decisión y dialogo bien podrían haber estado acompañados de una música efectista y un zoom descarado hacia su cara, al estilo culebrón, que ya puestos la doblamos al latino, le cambiamos el nombre a Stephen por "Juan Reyes" y hacemos que conozca al amor de su vida en un ordenado y erótico establo.  Una película no puede girar en torno a una actuación, aunque esta sea increíble, tiene que ofrecer algo más, y "La Teoría del Todo" apenas pone más carne en el asador.

Nota: 3/10

jueves, 22 de enero de 2015

BIRDMAN
(O LA INESPERADA VIRTUD DE LA IGNORANCIA)

Dirección: Alejandro González Iñarritu
Reparto: Michael Keaton, Edward Norton, Emma Stone, Zach Galifianakis, Naomi Watts, Andrea Riseborough, Amy Ryan.

En medio de un panorama cinematográfico donde los superhéroes están hasta en la sopa, donde las viejas glorias del cine de acción de los 80 se reúnen para seguir haciendo lo que mejor saben hacer a pesar de que muchos de ellos estén para el arrastre y donde en Hollywood parece que ya solo queda sitio para los jóvenes, resulta difícil encontrar una película que ejemplifique todo eso mejor que Birdman. Michael Keaton se interpreta a Riggan Thompson, lo que viene a ser como una especie de alter ego para el propio intérprete que en su día se enfundo el traje de Batman en las pelis de Burton.

Junto a él, un más que brillante Edward Norton, que en mi modesta opinión hace el mejor papel de su carrera, Emma Stone, que porque no decirlo, está mejor que nunca. La película resulta una maravilla en lo que se refiere a interpretación, hasta el punto de que en algunos momentos no sabrás si los actores están actuando como la su personaje en la película o como su personaje en la obra de teatro que se narra en la película. Se trata de una especie de rompecabezas narrado mediante el plano secuencia más alucinante desde el cine de Bela Tarr. El plano secuencia no se presenta en la historia como un pequeño elemento aislado de la narración de la película, el plano secuencia es la película en su conjunto.

Lejos de presentarlo como un momento de clímax, como el compatriota de Iñarritu, Alfonso Cuarón acostumbra a hacer en sus películas, el plano secuencia de Birdman es algo más que una secuencia o una situación. Es el modo en el que se cuenta la historia, es el fluir del tiempo escénico y es el vertiginosos paso del tiempo con elipsis incluidas. Durante toda la película, el espectador estará al borde del asiento esperando a que el plano acabe, y este no culminará hasta el mismísimo final de la película, excepto en una ocasión donde se volcará todo el significado del filme. Y no se piensen que Iñarritu ha resuelto el plano secuencia como en "La Soga" de Hitchcok, donde la cámara solo se movía de un lado a otro de la habitación sobre raíles. En "Birdman" gracias a la steady cam, la cámara seguirá a los personajes y se moverá de una forma totalmente libre por el escenario casi onírico que se nos presenta.

Y es que Birdman además de ser arriesgada técnicamente y estar magníficamente interpretada tiene un mensajito secreto oculto. Un mensajito revelado justo a tiempo y que debería hacer reflexionar a toda la industria. Como la crítica puede condenar o ensalzar una película de una manera casi irrevocable. Como los prejuicios y el rencor pueden atar de pies y manos a aquella persona que busca la trascendencia mediante el reconocimiento, cuando en realidad lo único que necesita es volver a sentirse como un ignorante. El "need" y el "want" expresados en un personaje completo, autobiográfico y con un dilema tal vez intranscendente pero de una indudable carga humana que nos hará empatizar hasta el extremo.

La película se resume para mí en 2 animadores vestidos de Spiderman y Optimus Price bailando sobre un escenario de Brodway acompañados de una charanga. "Birdman" es una oda a lo simple y a lo humano, a la capacidad de ganarse la vida siendo un completo ignorante sin que eso deba ser condenado, a la destrucción moral por parte los intelectualoides baratos. Sobre que es el arte, que es la gloria y si verdaderamente importan tanto como nos creemos. Que antes de ser una persona acabada intentando hacer algo de relevancia intelectual prefiero ser un vejestorio embutido en un ridículo traje de licra que sale a jugarse el pellejo al ruedo. Que Brodway es grande, pero Michael Keaton con sus 64 años corriendo en calzoncillos por mitad de la gran manzana también lo es.

Nota: 9/10

lunes, 19 de enero de 2015

DESCIFRANDO EL ENIGMA (THE IMITATION GAME)
Dirección: Morten Tyldum
Reparto: Benedict Cumberbatch, Keira Knightley, Charles Dance, Mathew Goode, Rory Kinnear, Mark Strong, Allen Leech, Mathew Beard.

Ya vienen los Oscar, y eso solo puede significar una cosa, y es que si quedaba por ahí alguna personalidad relevante que además de haber contribuido a algún avance de la humanidad tuviese escondido algún problemilla personal para que el actor de turno se pueda poner las botas, es hora de hacer una película de ello.

En esta ocasión le ha tocado a Alan Turing con su invento de la primera computadora y el elegido ha sido el Sherlock británico, adorado por las fangirls y últimamente también por los fanáticos de "El Señor de los Anillos" por poner voz al dragón Smaug, Benedict Cumberbatch. El reparto lo completan Keira Knighley, un excelente Mathew Goode, que poco a poco desde "Watchmen" va haciendo sus pinitos, (Y no es poca cosa, no hay que olvidar que ya trabajo con Chan-Wook Park en "Stoker") y Charles Dance con su valor en alza desde que apareció en la serie de la HBO "Juego de Tronos".

Hagamos un resumen rápido de la película. Es una peli de Oscar, de esas que uno va a ver al cine y sale con al lagrimilla, esa lagrimilla que los productores de la película esperan que les caiga también a los críticos de la academia y suelten la estatuilla dorada. Eso quiere decir que muy a menudo en la película nos encontraremos con escenas hechas con el único y especifico propósito de que Cumberbatch se suelte una perla, de esos en los que súbitamente se pone a llorar o explota de rabia sin venir a cuento porque todo el mundo sabe que llorar es muy orgánico y si no lloras no ganas Oscar.

Salvando el concepto de la película, hay que reconocer que está planteada de una manera encomiable. Prácticamente toda la película ocurre en el interior de una pequeña oficina, y las escenas están muy bien pensadas. Además, y a pesar de que las actuaciones vengan marcadas por la tendencia pro-academia, no defraudan, y Cumberbatch lo hace realmente bien. La verdadera lástima es que el pobre Benedict tenga que interpretar al "Sheldon Cooper" de la Segunda Guerra Mundial para que se le reconozca el mérito, cuando sus papeles en la serie "Sherlock" o incluso su rol de villano en "Star Trek: En la Oscuridad" ya tenían factores que deberían haber sido valorados. Pero al parecer interpretar a Sherlock Holmes o ser el villano de la saga Trekkie no eran papeles lo suficientemente serios como para que nadie diese un duro por él. Primero consigues la nominación y luego hablamos.

La película tiene un enorme punto fuerte, su banda sonora. Desplat firma uno de sus mejores trabajos y eleva la música de la película a el ranking de mejor bandas sonoras del año. En esa escena del final del equipo quemando el trabajo y las notas de Desplat elevándose con las letras  en la pantalla he de reconocer que se sintió la grandeza que cualquier película nominada al Oscar debería tener.

Como conclusión final, podemos declarar que si, "The Imitation Game" es una película de Oscar de manual. Pero ha sabido aprovechar sus elementos de una forma inteligente, lo que ha hecho que acabe siendo una película muy pasable que destaca de entre la media de las nominadas de este año. Cumberbatch se consagra, y nos da una película que de aquí a 2 años estará olvidada, pero que no obstante, nos hará pasar un rato agradable en el cine en el que además aprenderemos un poco de historia y de criptografía.

Nota: 6/10

lunes, 12 de enero de 2015


MEJORES PELÍCULAS 2014: 

CORRECCIÓN: Las mejores películas que Yo he visto en 2014, no dudo que por ahí habrá mejores que aún no he tenido tiempo de visionar.

15-BAJO LA MISMA ESTRELLA (Josh Boone):
Hacer una película para el consumo masivo adolescentes es una apuesta segura para obtener un bodrio sin precedentes. Es por esto, que encontrar una película como "Bajo la misma Estrella" sorprende. No porque no le falte su buena dosis de hormonas y diálogos "espontáneamente"  ingeniosos, sino porque presenta pequeñas diferencias con sus hermanas de género. Si el cine adolescente debe ir en una dirección nueva, es esta.


14- X-MEN: DÍAS DEL FUTURO PASADO (Bryan Singer):
Este año hemos acabado hasta las narices de tanto superhéroe suelto, y de entre todas las películas que nos han llegado muy pocas han merecido la pena, Sin embargo, la saga X-men ha sabido dar un vuelco interesante al desarrollo de su trama y ha sorprendido con la que posiblemente es la mejor película de toda la saga.


13- THE ZERO THEOREM (Terry Gilliam):
La nueva película de Terry Gilliam que nos ofrece su mezcla habitual, distopía, humor absurdo y un estilo de grabación caótico y cargado de planos aberrantes. Sin embargo en esta película Gilliam consigue transmitir un mensaje oculto muy bien llevado, y el actor alemán Christoph Waltz se marca una muy potente actuación.

12- EL GRAN HOTEL BUDAPEST (Wes Anderson):
La pequeña joya a la vez que broma pesada de Wes Anderson. Una película que carece de una trama solida pero que pone toda su fuerza en el estilo visual mediante planos simétricos, maquetas, y demás elementos que hacen a la película un pequeño cuentecito de agradable visionado. Exquisitamente detallada y con unos personajes y diálogos que darán de que hablar.


11- UNDER THE SKIN (Jonathan Glazer):
La íntima y tenebrosa película del director escocés Jonathan Glazer. Comentada hasta la saciedad por el desnudo integro de Scarlett Johansson que en esta película interpreta a una alien que se camufla e el cuerpo de una atractiva humana para raptar y comerse a seres humanos. Aunque la sinopsis pueda parecer una película bizarra de los 80, no se confíen, la película sorprende y mucho. Algunos ya hablan del heredero de Kubrik.


10-LA LEGO PELÍCULA (Phil Lord, Cristopher Miller):
Sin duda la mejor película de animación del año con el permiso de “Como entrenar a tu dragón 2”. Divertida para los pequeños pero también para mayores. De hecho, cuando fui a verla al cine rodeado de niños, me sorprendí a mi mismo riendo a carcajadas más solo que la una en determinados momentos. Y es que la Lego película tiene cosas que los niños no pillan, y es lo que le hace no ser una película de animación más.


9-AL FILO DEL MAÑANA (Doug Ligman):
No es casualidad que Tom Cruise haya participado en las mejores películas de acción de los últimos años (Misión imposible: protocolo fantasma, Jack Reacher y Oblivion) Esta película podría resumirse en una sola frase: es una buena película de acción de manual. Acción frenética muy bien llevada, un montaje impecable, y unas actuaciones correctas que en ningún momento rompen el esquema de tiros y explosiones. Y es que el que una película sea de acción no quiere decir que no sea una buena película. Si cumple su objetivo (Que lo cumple) merece estar a la altura de cualquier drama.

8-EL LOBO DE WALL STREET (Martin Scorsese):
Divertida como ella sola. Con un Dicaprio brillante y una dirección depurada del maestro Scorsese. Aunque criticada en su estreno por contener demasiado sexo, drogas y Rock’n`Roll, hay que reconocer que más allá del contenido la película funciona como un reloj a lo largo de sus largas 3 horas de duración. Nos deja escenas increíbles como Dicaprio intentando abrir su ferrari con el pie bajo el efecto de las drogas o a Jonah Hill enseñando su pajarito en mitad de una fiesta. Y por supuesto, Mathew MacConaguey golpeándose el pecho, como olvidarlo.

7-RELATOS SALVAJES (Damian Szifron):
La joya argentina del año. Siguiendo el talento de otras predecesoras como “El secreto de sus ojos”. Indiscutiblemente la película más divertida e inesperada del año. A las ordenes de el hasta ahora desconocido Damian Szifrón, veremos desfilar por pantalla a todo un elenco de reputados actores argentinos perdiendo los nervios ante situaciones que les volverán auténticas maquinas de generar tragedias. Con su esquema narrativo de varias historias independientes, hace a esta película la “Pulp Fiction” argentina.

6-BOYHOOD (Richard Linklater):
Y llegamos a los platos fuertes, para empezar la película de Richard Linklater que ha hecho que se les caigan las bragas a todo crítico viviente. Una película grabada a lo largo de 12 años. Actuaciones brillantes y una trama que al final viene a no contarte nada. Y esa es la clave de la película, que no intenta contarte nada. Cuando se dice “Boyhood es como la vida misma” tienen un significado más allá de la frase hecha. La vida no tienen una única enseñanza ni mensaje, y es por esto que Boyhood no pretenderá dárnoslo, simplemente nos contará la vida de un chico y nos dejará tal y como estábamos cuando veamos que la película acaba con el prota fumado diciendo gilipolleces sin sentido. ¿Dónde está el mensaje de la película? ¿Acaso la vida lo tiene?

5-A PROPÓSITO DE LLEWYN DAVIS (Joel y Etahn Coen):
Cuando a una película de los Coen le quitas el humor negro y la violencia ¿Qué queda? ¿Algo que merezca la pena? Sin duda, sí. Y esta película es la prueba de ello. Una banda sonora impecable, unas actuaciones sutiles y dignas del más elevado drama. Un Oscar Isaac que solo queda eclipsado por su gato mirando por la ventanilla del metro. Algunos la han considerado la mejor película de los Coen. Y no andan desencaminados, se trata de su mejor película desde “No es país para viejos”.

4-ENEMY (Dennis Villeneuve):
3 años, tres películas, tres obras maestras. Este es el panorama que nos presenta el desconocido y talentoso director canadiense Dennis Villeneuve. Basada en la novela de “El Hombre Duplicado”, “Enemy” es la película más indescifrable de 2014, y una auténtica obra maestra del séptimo arte. Con un Jake Gyllenhall soberbio actuando por cuenta doble, la película nos sumerge en una atmósfera viciada donde cada dialogo puede abrir una nueva posibilidad a la trama y donde cada detalle se quedara grabado en nuestra retina para volvernos un poquito más locos. Arañas.

3-HER (Spyke Jonze):
Y llegamos al podio. Con una de las películas que mejor ha sabido expresar en la historia del cine la necesidad de conectar, las nuevas tecnologías y las relaciones de pareja.  La que se ha convertido en la mejor película de Spyke Jonze y ha elevado a Joaquin Phoenix al estatus de leyenda. Sin duda la mejor película de la pasada edición de los Oscar. Manda narices que haya tenido que ser la ciencia ficción la que ha sabido ilustrar el amor como nunca antes se había hecho. Y hablando de ciencia ficción, pasamos al número 2…

2-INTERESTELLAR (Christopher Nolan):
Nolan sin ataduras, El físico teórico Kip Thorne asesorando. Un drama magnifico con personajes bien construidos. Una historia que eleva las decisiones a su máxima potencia. Una banda sonora sobrecogedora y unas escenas inolvidables que han conformado, la que es en mi opinión la mejor película de Nolan hasta el momento, que ya es decir. Una película profunda, científica y muy llevadera y trepidante a la vez. Puro Nolan en el espacio. Sigue muy, muy de cerca a la número 1, pero esa solo podía ser…

1-PERDIDA (David Fincher):
Solo David Fincher  podía ocupar el trono con la mejor película del año. Este drama con toques Hitchcockianos con una brillante Rosamund Pike y un más que correcto Ben Affleck. Una película que muestra con inusitada claridad lo que es el matrimonio moderno, los medios de comunicación y la imagen pública. Todo esto acompañado con el impecable estilo narrativo de Fincher y dentro de la atmosfera de malrollismo a la que nos tiene acostumbrados. Una increíble banda sonora de Trent Reznor y Aticuss Ross, en definitiva, una película redonda que dejará al espectador clavado en el asiento cuando los créditos aparezcan en pantalla al final de la película.

domingo, 11 de enero de 2015

EL HOBBIT: LA BATALLA DE LOS 5 EJERCITOS:
Dirección: Peter Jackson
Intérpretes: Martin Freeman, Richar Armitage, Ian Mackellen, Evangeline Lylly, Benedict Cumberbatch, Lee Pace, Hugo Weaving, Cate Blanchett, Christopher Lee, Orlando Bloom,  Luke Evans, Ian Holm, Aidan Turner.

Aquí llega la esperada tercera parte que nunca debería haber visto la luz. Basada en las últimas 40 páginas de una novela corta para niños y en la cual Peter Jackson no tendrá reparo alguno en meternos con calzador situaciones ya no solo que no salgan en el libro, sino que no quepan en la cabeza de ningún fan de "El señor de los Anillos" por absurdas, haciendo gala de un freestyle digno de Joel Schumacher.

Una película tan irregular que pasará por alto eventos clave en el libro con secuencias escuetas y faltas de profundidad, pero que te cascará más de 40 minutos de peleas individuales entre personajes que nunca deberían haber estado allí (Légolas, Tauriel...) Con orcos random que súbitamente cobran protagonismo porque son más tochos que los demás. Convirtiendo una película que narra una batalla, en una película en las que al final los personajes principales se darán de tortas contra los malos de manera "personal". Ya sea sobre un lago helado, sobre cabras montesas con super-poderes o sobre una torre que de descuajeringa a medida que luchas en ella. Pero ojo, que no pasa nada, que Légolas se pasa por el forro de sus blancas y delicadas gónadas de elfo las leyes de la física y de repente puede andar sobre bloques en caída libre como si del Mario Bros se tratase.

Que digo yo, Peter Jackson, si querías llenarte los bolsillos igualmente, haber ampliado metraje con algo del reino de Angmar, porque a más de uno le dejaste con las ganas de entrar en esa fortaleza orca en la que te paras 2 minutos en toda la película. Pero no, despediros de todo el "realismo" del señor de los anillos porque en esta apoteósica película podrás ver gusanos gigantes sacados de "Dune", Trolls de las cavernas con patas de alambre, y demás chorradas que parecen haber salido de la insana mente de un fanático que haya puesto el mayor empeño en destruir la obra de Tolkien.

Porque además en "El Hobbit" tienes ordenador hasta en la sopa. Y no contentos con ponerte el ordenador te lo remarcan para que digas "eh que bien está hecho" y acabas de él hasta las narices. Que una cosa es que hagas un dragón por ordenador, pero es que hasta al cara de algunos enanos estaba retocada, que lo vuestro es insano. Yo veía El Señor de los Anillos y flipaba porque no distinguías los efectos de la realidad, estaban camuflados mediante tonos grises, oscuridad, los técnicos se buscaban la vida, Ahora la Tierra Media es un mundo multicolor como si de "My Little Pony" se tratase, donde hay seres mágicos del país feliz, de la casa de la gominola de la calle de la piruleta.

Personajes que sobran, como el unicejo de las narices que está siempre dando por saco. Que si, que ya nos ha quedado claro que es malo, muy malo. No le dediques 20 escenas en la película.  Ah espera, que tienes que rellenar dos horas y media, y si te ciñes al libro te da para una hora y veinte como máximo. Ahora entiendo muchas cosas.

En el fondo la película es eso, dos mitades, una que se ciñe al libro, que es más que pasable, es competente, una parte que incluso te devuelve la fe en la trilogía. Y otra parte de freestyle deleznable. Porque aquí el error de fondo ha sido uno, y es que los guionistas de Hollywood no pueden ponerse a la altura de Tolkien. Porque aunque planees al detalle una lucha épica, esta no dejara de ser una pequeña anécdota dentro de lo que de verdad importa, que es la historia. Y cuando concatenas 6 peleas diferentes para alargar la película una hora más consigues esto. Una aberración contra la novela, un producto manufacturado en el cual la pelea ya no es símbolo de honor ni de fortaleza, sino de protagonistas muy bien entrenados peleando contra malos muy bien entrenados, como si de una película de 007 se tratase. Donde se ha desvanecido ese sentimiento que inundaba la trilogía original de "realmente lo tienen jodido y posiblemente pierdan" y donde lo único que ves son peleitas extremadamente largas donde la epicidad se desvanece a pasos abrumadores.
El poder del dinero. Pon a un visionario director neozelandés al mando de un casi desconocido grupo de actores a rodar durante más de 2 años alejados de la mano de Dios las adaptaciones de unas novelas que pocos conocen. 17 oscars, millones recaudados y la que posiblemente es la mejor trilogía de la historia. Deja que los buitres de la industria se metan en ese fino tejido de visionarios y de gente con ganas de hacer las cosas bien y conseguirás sus abominables secuelas.

Cuando a Viggo Mortensen le ofrecieron salir en "El Hobbit" se negó, pues era consciente de que su personaje no salía en la novela. Quizás, lo que le ha faltado a este proyecto haya sido más gente como Mortensen. Gente que a pesar de que sabía que tenía un proyecto muy jugoso por delante decidió hacer un esfuerzo y ser fiel a la historia y a su autor. Gente que se mueva por el amor al arte y no el amor a la recaudación en taquilla. Lástima que este impecablemente realizada, su diseño de producción sea la repanocha  y los actores no lo hagan del todo mal, porque realmente la nota que me hubiese gustado ponerle es un cero como una casa, eso sí, la casa de puerta circular.

Nota: 5/10